Hoy me desperté con los gritos de mi abuela (que sale en la foto), me decía que me levantara porque quedé en acompañarla a votar. Me levanté rápido, tomé desayuno y me vestí, nisiquiera me lavé la cara jajajaj. Ella estaba muy arreglada, con vestido y tacos, como para una ocasión especial

, me gusta esa solemnidad de le gente vieja, como cuando van a misa también, todo con tanto respeto. Salimos de la casa y habíamos caminado no más de 5 pasos, cuando se nos acercó otra viejita, aproximadamente de unos 80 años y nos dice: "les quiero pedir un favor, puedo ir con uds. a votar??", claro! le dije yo, ella apenas escuchó esto se agarró fuerte a mi brazo, me daba risa, parecíamos alcuza, yo tan grande con estas dos señoras agarradas a mi a cada lado.
Nos fuimos caminando lentamente, yo con mucho cuidado de que ninguna de las dos se cayera, en todo caso se notaba que mi abuelita winner tenía mejor estado físico que ella. Nos fuimos conversando, casi al llegar al lugar de votación, me dijo que le iba a agradecer a dios por habernos encontrado, vive sola y estuvo toda la noche preocupada por tener que ir a votar sola.
La dejamos en la entrada, a ella le tocaba en las primeras mesas, en cambio con mi abuela teníamos que subir al tercer piso, le dije que nos encontráramos en la entrada, me dijo que no me preocupara.
Al salir con mi abuela, tuvimos la suerte de encontrarla, la pillamos!!, estaba tan contenta, otra vez nos fuimos del brazo, dejé a mi abuela en la casa y fui a dejar a la señora, que a todo esto no le pregunté el nombre. Sorpresivamente vivía a no más de 100 m de mi casa, yo la había visto hartas veces, quizás cuantas veces se sintió sola y no lo sabía; la dejo, le dije, ella quería que entrara, qué me costaba estar un rato con ella así que entré, tenía una casa hermosa, muy limpia y ordenada, fuimos al patio, tenía una gruta con una virgencita y unas placas de "gracias por el favor concedido" una vela encendida apenas, la que apagué y unas flores de plástico. El jardín era grande, con hartas azucenas y unos damascos, tome me dijo, un clavel, me sentí tan bien, debe haber estado muy contenta para regalarme una de sus flores, también me regaló unos damascos y me hizo un tour por la casa. Su pieza estaba llena de imágenes religiosas, "ellos son mi compañía..."
Le pregunté si no le daba miedo vivir sola, me dijo que no, que de hecho pasaba las fiestas solas, medio pena, le dije que la iba a ir a ver esta semana, ojalá lo haga, ella se alegró mucho. Me fui, salí de su casa con alegría por haber entregado algo, la verdad es que uno nunca se imagina cuando y cuanto puede ayudar, me dieron ganas de abrazarla...la verdad es que los viejos son mi debilidad, me matan. No lloré con Titanic, pero sí me salen lñagrimas con propagandas de la fundación las rosas por ejemplo. Debe ser por mi abuela, es la única imagen así que tengo, ella vive con nosotros desde que nací y prácticamente me crió, es mi adoración y yo la suya. El gran miedo de mi vida es no retribuirle todo lo que me ha entregado, el poder hacerla feliz, esa es una de las cosas que me duelen por tener que estar 10 meses estudiando fuera de la casa, pero creo que lo he hecho bien, somos bien compinches y con el transcurso de mis años he aprendido a sobrellevar su mal genio y en cierta parte, manejarlo con mis tallas para bajarle el perfil a las cosas. Pensé en la suerte de mi abuela, de vivir con nosotros, no como esta señora, que está sola, que aunque no lo admita, debe anhelar la compañía, como la nuestra, hoy, por el azar de la vida. Por lo menos a mi no me gusta la soledad, espero no llegar a eso, hay tanto que compartir, tantas historias que contar, el ser humano está hecho para vivir en sociedad, espero ir a verla y aprender lo que ella me pudiera enseñar... Aprovechemos a los viejos, tienen mucho que entregar